Creo que hay pocos hechos que podrían conmover a toda la humanidad, es decir situaciones que por su impacto movilicen los sentimientos de los diferentes pueblos y etnias que habitan este planeta.
Seguramente habrá hechos del orden del amor y la alegría que lo puedan hacer, no se… la vuelta del Salvador, el descubrimiento de la cura del cáncer, el fin de las guerras y del hambre.
Pero también los hay desde el orden del miedo, el espanto y el temor a lo desconocido.
En este sentido, creo que nos acercamos a un punto de inflexión, a un momento histórico para la humanidad, de aquí a unos cincuenta años (recuerden, en algún lejano diciembre de 2058) alguna de estas tres situaciones se dará.
• Un país logrará tener un ejército de robots, es decir que pueda iniciar y desarrollar una guerra sin bajas humanas, al menos de su bando. Que la contienda bélica quede enmascarada en un simple cálculo de producción industrial, alejado de cuestiones morales sólo regidos por cuestiones de costos. Dada esa situación: ¿habrá un desarrollo moral que impida hacer uso de tamaña fuerza? Si esta supremacía militar se diera, el mundo cambiaría, siempre hemos tenido países hegemónicos pero nunca un imperio con garantía de victoria. Tengo para mí que se avecinaría una era oscura, de una negrura nunca antes vista.
• El tiempo está cambiando, las catástrofes naturales no son patrimonio exclusivo del cine. Hasta ahora sólo se dan en lugares circunscriptos, con influencias solamente locales: Inundaciones, Volcanes, Terremotos, Sequías, Tsunamis, Aludes de lodo, Tornados, etc. Qué pasaría si nos enfrentáramos a un evento planetario, algo que afecte a más de 70 % de la población: La caída de un meteorito gigante, el derretimiento de los polos y la elevación del nivel del mar, un terremoto extenso y devastador, etc. ¿Será el marco necesario para una verdadera solidaridad a nivel planetario? ¿Nos volveríamos aún más egoístas y pelearíamos a muerte por nuestra cueva, nuestro refugio?
• ¿Y sí finalmente "ellos" existen e hiciéramos contacto? Si de repente en los radares de alguna de las potencias apareciera una nave extraña y lentamente bajara en algún lugar público y a la vista de todos: ¿Seguirían en pié todas nuestras seguridades? ¿Seguirían las guerras? ¿Aceptaríamos lo que ellos pudieran decirnos? Las religiones, que va… La Religión: ¿Aceptará el desafío que supone la existencia de otras entidades pensantes? ¿Cómo reaccionaría nuestro ego, cómo nos amoldaríamos a la idea de que posiblemente no seamos la cima de la creación?
Ojalá en cincuenta años estemos vivos, vos y yo, para comprobar cuál de estas posibilidades se cumplio o si todo fue simplemente una vacua charla de blog.
En lo personal, me gustaría la tercera opción, fue la que generó mejores películas….
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